sábado, diciembre 31, 2011

De aqui a la eternidad

Campos verdes cubiertos de coloridas flores

adornan hoy mis sueños, debo apresurarme

a cosecharlas para hacer el floral arreglo de

mi inquietante y solitario funeral.

 

Entre amigos compungidos me veo ya tendido,

pocas lágrimas para tantas vivencias;

demasiados lamentos entre ajenas gentes,

para tantos sinsabores repartidos.

 

Veo tantos instantes desperdiciados

que podría recogerlos y armar con ellos

una nueva vida, sin embargo, me quedan

pesados siglos por ver pasar, de aquí a

la eternidad…

De resultas

Sumérgete profundo en un sueño,

un sueño irreparable, un sueño de inmensidad,

un sueño sin final , sueño de bocas secas y labios

agrietados, un sueño, un simple sueño.

 

Agitas tus miradas de fabricación febril,

dejando amargas texturas de sudor impregnadas,

pules los raidos dientes, convulsionando

de locuaz impertinencia.

 

De resultas que ni en sueños dejas las

disonantes imprecaciones, derramas sinsabores

y repartes tristezas por millares, ríe cual bufón,

idiota útil, muestra el blanco color macabro,

brillando arriba del rojo y destrozado pecho.

Lecciones prestadas

La llamada felicidad es ajena en el mundo, a lo sumo creerás
encontrarla en lo que das, no en lo que él te ofrece.
Torpe intención hallarla en cosas vanas y externas,
pues al igual que quien nace y crece, también fenece.




El camino más largo es el que se hace tomando atajos.
¿Para que correr y apabullar a otros al caminar?
Preferible dedicar esfuerzo a hacer bien los trabajos,
antes que obligarse a desandar, repetir y rectificar.


La importancia es cuestión de mera apreciación,
y, al igual que el poder, circunstancial.
Deja las vanaglorias a quien persigue aceptación,
sigue tus razones y busca lo trascendental.


Hay más mérito en hacerse útil que en ser reconocido
importante. Trabaja con gusto y se constante,
preferible maná en campo mustio y fragante,
antes que mala yerba en campo reverdecido.


Quien no acepta a los demás con los defectos que les son propios,
deberá afrontar la vida en soledad, pues jamás encontrará seres perfectos.
Deja esa infame pretensión y no exijas como poseído por el opio,
obséquiate generoso, pide cauto y justo, sin ser abyecto.


La riqueza es externa y ajena, enceguece, embrutece
y cambia de manos con prontitud, eclipsa el valor de los seres.
¿Acaso crees que: Cuánto tienes, cuánto eres?
Lo que son las personas, es lo que les da valor, las enaltece.


Es preferible esforzarse más que excusarse mucho.
Quien destina sus esfuerzos a elucubrar razones para
no hacer o haber hecho lo que no es, desperdicia el rancho,
tira, afloja, dice, llora, más no de frustrar escapará.


La belleza es efímera, quien fundamenta sus aprecios en ella,
deberá vivir a prisa y no será apreciado en lo que es y vale.
Tanto como los humanos cambian los criterios de querella,
se justifican y desaparecen los motivos que lo hermoso hacen.


No recibas a nadie, a menos que estés en disposición
de ayudarle a irse siendo mejor y más feliz.
Deja el azoro y simplemente causa sensación,
en estas lides, si no eres experto, hazte aprendiz.


Quien valora el amor que recibe, está en posibilidad de prodigar, a su vez, amor a los suyos.
No se olvide, lastimosamente no todos están en capacidad de amar, sentir y dar;
dichoso quien pueda hacerlo y haga felices a quienes quiere.
De la cosecha separa, guarda y cuida el mejor capullo,
que conserve su aroma y lozanía para que al entregar,
exprese todo el cariño fiel y sano que sin decirlo, no se infiere.


De los actos y pensamientos aguarda las consecuencias,
inútil es esperar premios o castigos.
Vano será alegar grave dolor, insana ira o demencia;
en justicia, si a la humana escapas, en la divina resulta.


La vida es tan corta, que no vale la pena esforzarse en tomar distancias;
esfuerzo vano, pues el orden natural lo hará:
bien sea por las circunstancias
de la vida o por la muerte misma, llegará.

sábado, diciembre 24, 2011

Deja de llorar

Seres violentos y desalmados,

basados en la sinrazón y la brutalidad,

las palabras siempre serán cortas

para expresar tanta crueldad.

 

Idean formas nuevas de sumisión,

esclavizan las mentes y voluntades

de quienes a su lado doblegados están

y seguirán mintiendo hasta la eternidad.

 

Predican la humildad acompañada de resignación,

al paso que con dinero enajenan la razón,

más sólo son patrañas de guerra y destrucción,

luchas a muerte a diario, todo a su favor.

 

Contra este sucio crimen resta maldecir

el bruto orden impuesto y de frente resistir,

fundamenta en la razón y enarbola humanidad,

quema sus códigos, no sucumbas por ingenuidad.

 

Importante develar sus planes y advertir,

romper las dulces máscaras y disentir,

revienta las cadenas sucias a matar,

muestra la verdad y no vayas a callar.

 

Silencia ya sus voces no te dejes embaucar,

revela sus secretos y sus misterios,

¡libérate!, supera todos tus infantiles miedos,

¡levántate!, sé un hombre, deja de llorar.

 

martes, diciembre 06, 2011

Un roto sueño

Una joven de cabellos curvos,

ojos grandes casi sonrientes,

pensamientos frágiles y

soñadores, pasos ágiles y gráciles,

esa ayer niña y mañana mujer,

es amada con desenfreno.

 

Ese amor palpitante e incontenible,

predica adoración y empeño,

abarca vida, pasión y sueño,

traduce trabajo y sudor al ceño.

 

Radiante nena sigue tu camino,

déjame a tu lado andar,

confía en mí, seré guardián,

compañero y amigo, y,

quizá, mañana recoja para

ti y repare un roto sueño.

lunes, diciembre 05, 2011

Cuando los perros ladran

Se oye cantar la noche,

justo luego de estar mediada,

casi siempre rodeada de las ansias

de un buen grito, enceguecida

por la oscuridad demente de

una idea infeliz y odiada.

 

Se pinta de rojo el alba,

justo luego de tibiar el alma,

mascando rabias de cosas vanas,

olvidando rezos que ahogan

penas, dejando risas de miel tiradas

en muecas, sin mover la cara.

 

Se acobarda de azul la mente,

justo luego de matar el alba,

sonriendo de fugaz macabra,

cuando el cantar de la noche acaba,

inmola las ansias y también el alma,

cuando los perros ladran.

martes, noviembre 08, 2011

Realidades... ¿?

¿Qué arriesgar cuando se ha perdido lo esencial?

Más he perdido por pequeñas cosas antes que por grandes vicios.

¿A qué renunciar cuando se ha negado la propia dignidad?

Vano es decir, cual estoico, que nada tiene importancia.

 

Somos seres hechos de sobras del tiempo

y al igual que él necesitamos espacio para vivir,

de allí, también, que desaparezcamos conforme vivimos.

Cada tic tac nos mata un poco más, nos acerca al final evitado.

 

Requiero de tanto en tanto alcohol para distorsionar

la fugaz percepción de la realidad, tomar de ella una lectura renovada,

quizá amañada, quizá errada, pero, al fin de cuentas, otra lectura…

La bebida conduce el pensamiento a niveles de comprensión

a los que difícilmente se llega desde la plana mirada de la sobriedad,

esa recepción de totalidad e inclusión a que nos acostumbramos.

El trago descompone el orden y amaña uno renovado,

ilógico por veces, difuso en otras, diferente en todo caso;

establece entre las partes relaciones y prioridades diferentes,

sencillamente, hace rumiar las ideas. 

En este sentido es un método de conocimiento.

Sin olvidar que libando licor generalmente aflora el parlanchín,

inicia sus dictados y monólogos a los que no vale la pena resistirse,

pues volverán y revolverán el estado de cosas.

Sus imperiosas palabras podrán alinearse en incomprensibles frases,

pero algo de verdad traerán consigo, al menos, la verdad no revelada,

aquella verdad que a nadie importa… menos… aún…

La sobriedad nos lleva y conduce por parajes

fluorescentes por esta ciudad maldita, cual autómatas por calles

insensatas. ¿De que nos sirve la sobriedad si nos aleja de la verdad?

 

El error, nombre que damos a no lograr lo pretendido.

El mío, por cierto, ha sido querer ver las entrañas de las cosas,

husmear, descomponer y componer hasta el límite…

bajo las capas de lo admirable se devela la vacuidad de los simples mecanismos.

 

La realidad, ¡oh error!, las realidades, son simples construcciones

de nuestra imaginación excitada, son tan provisionales como el

tiempo, existen en la medida que no se den nuevas lecturas y

hasta tanto lleguen renovadas interpretaciones,

 

martes, octubre 25, 2011

Abandonado

Hoy que tu cercanía se ha perdido,
hoy que tus brazos ya no son mi refugio,
hoy que de tus palabras se ha silenciado el eco,
hoy que de nuestros días quedan las noches frías,
hoy que del calor de tu piel sólo guardo un recuerdo tibio,
hoy que tantas renuncias dejan la adicción de seguir perdiendo,
me abandono en silencio…

Dejo el grito ahogado,
dejo la lágrima oculta,
dejo la sonrisa petrificada,
dejo la caricia contenida,
dejo el amor hecho añicos,
dejo la vida al azar,
me abandono en silencio…

Aguardo un retorno imposible,
aguardo una muestra de humanidad,
aguardo la salvaje picardía de un guiño,
aguardo la inmensidad de la voluntad,
aguardo una manifestación divina,
aguardo el abrojo de la fe,
me abandono en silencio…

Abandono en silencio mi parecer
por subjetivo y tendencioso; del
hoy nada me importa por ser
la historia de un mañana incierto y
el futuro cierto de mi ayer desperdiciado;
dejo, tras respirar, el aire enrarecido y mortecino
por haberlo tenido dentro,
aguardo, igual que tus sueños destrozados
por haberlos compartido conmigo,
algún día me encuentres cuando seas
coleccionista de tonterías…

lunes, octubre 17, 2011

Seres de horror y palabras

Las luces que estimulan el ojo
cual recuerdos imborrables que
se hacen presentes cuadro a cuadro
en nuestras mente, perennes.
Tanto vacio, tan pobre constancia,
sólo se entiende por el rechazo del tiempo.

Poca ternura albergo entre brazos, más
parecen desnudas caricias, tan aterradoramente
desnudas que descubren las memorias ignotas,
besos con sabor a vinagre, tragos
para la sobriedad helada de un
redoble de campanas anunciando muerte.

Sigue tropezando incesantemente,
pequeño ciego sin fe, tan desarraigado,
tan ridículamente aferrado a la oscuridad
cegadora de haber cerrado los ojos,
que impide a sus pies moverlo a parajes
con menos muertes para llorar…

Esos pies fundidos con el pantano sórdido y fétido
de los zumos de los cadáveres que pululan por los
pútridos recuerdos, esos que entierra una y otra vez,
esos que reviven fulgurantes como el rayo en el instante que
sobreviene, y que es preciso verles morir una vez más,
para hacer doblar las campanas y… de nuevo.

El pavor frente al espejo que devela las miríadas
de palabras fuertes que le aferran a las promesas
vanas y necesarias por las que vale la pena
vivir, sólo palabras le mantienen firme en
la porfía de intentar no sucumbir ante
la tentación de desvanecerse en un  cálido suspiro.

Ya no quedan ojos para ver belleza, ya estos
oídos se niegan a escuchar amores, ya se tiene
el paladar apto sólo para degustar la hiel, ya se
huele sólo dolor, ya se abraza únicamente el
miedo y la soledad, con brazos trenzados al vacio…
seres de horror y palabras suspirando inútilmente.

Tengo el funeral de mi destino a medias,
concurren la soledad y el vacio, lágrimas
colectadas por el camino adornan el
féretro en que sepultaré mi futuro negado,
las palabras por decir son las únicas que llenarán
las manitas regordetas del niño muerto…

miércoles, octubre 12, 2011

Sin Vos

Cuando la vida cobra en lágrimas lo que se ha hecho sufrir a otros,

se vuelve revancha amar para reclamar excedentes en cariño.

 

Continuaremos tropezando con las propias limitaciones,

simples complejos y auto-des-estima en derroche sin par.

Ya se tendrá que reconocer cuánto se ha desperdiciado la vida

pensando en triunfar en vez de admirar el logro que es vivir…

Desde la muerte, quizá, encuentre la manera de entender

la hazaña de empeñarse en vivir aunque no se reconozca propósito.

 

Por mi parte seguiré con el tedio de encontrar motivos para

esta porfía que llamamos vida… sin razones, sin sueños… sin vos…

 

 

martes, octubre 04, 2011

Inmensidad

Estar sentado en medio de un rebaño contrito y ansioso de gritar sus miserias.

Ver cuánto he amado, cuán maravilloso ha sido el inmenso amor que me han prodigado.

Jamás creí que eso poco que he hecho ha significado amor desde los tuétanos, visceralmente, racionalmente, siendo yo: simple y limitadamente amándote.

La inmensidad de lo Divino, lo reservado y a Él atribuido, se ha materializado en medio de mis entrañas para amar lo tuyo en su total dimensión: la grandeza del cosmos hecha mujer.

domingo, septiembre 25, 2011

LAS UNIVERSIDADES, LOS DOCENTES Y LOS ESTUDIANTES QUE QUEREMOS

¿Hasta cuándo las Universidades continuarán en su pérfida intención de conservar el estado de las cosas con el único fin de proteger a quienes se benefician de ello?.
Creo que, retomando el discurso de los estudiantes de Universidad Nacional de Tucumán en la Argentina de 1969, deberíamos promulgar un manifiesto donde indiquemos en tono enérgico y con una posición firme que DESEAMOS UNA UNIVERSIDAD:
  • ·         Comprometida más allá de la palabrería de una planeación estratégica, con sus visiones, misiones y valores que ensalzan y adormecen pero alejados del diario acontecer;
  • ·         Con un cuerpo institucional verdaderamente comprometido con la base social, con la comunidad;
  • ·         Conocedora de la historia, que actué en el ahora para garantizar el mañana añorado;
  • ·         Que busque aportar a la solución de la problemática del entorno;
  • ·         Preocupada por traer a discusión los contenidos que permitirán salir del atraso tecnológico en que nos encontramos;
  • ·         Que genere consciencia entre los profesionales en formación respecto de la necesidad imperativa de tender a formas de convivencia social ventajosas para toda la comunidad, donde se atienda al bien común como pretensión íntima del individuo;
  • ·         Con docentes aptos y preparados para esa labor, no simples ganapanes, misóginos y desconocedores de la magnitud social de su tarea y compromiso;
  • ·         Con docentes que a partir de sus experiencias, comprensión de las necesidades del entorno, conocimiento de la comunidad a la que se deben, y, con la firme convicción del valor de las personas que se dispusieron a escucharle en actitud de aprendizaje, se esfuercen por hacerse maestros;
  • ·         Sin estudiantes cuyo único propósito profesional es hacerse vencedores en un mercado laboral, sin afán de conocer ni cumplir con lo requerido por la sociedad para la profesión por la que han optado;
  • ·         Con gente conocedora de la problemática de las comunidades y de la nación, que ven en estos espacios alternativas de discusión de las ideas para conjurar estas situaciones;
De muy especial manera, exijamos una Universidad donde se formen CONTADORES bajo parámetros institucionales, propósitos científicos y con posibilidad de trabajar en la construcción de la patria ansiada, primordialmente, personas que alcancen:
  • ·         Probidad, honestidad, conciencia ética e incorruptibilidad;
  • ·         Conciencia nacional a partir de la sana discusión en cada una de los espacios dispuestos;
  • ·         Preparación, habilidad y entrenamiento para afrontar los problemas Colombianos y latinoamericanos con rigurosidad científica, pero ante todo, a la luz de la conveniencia social y el bien común;
  • ·         Sin cátedras de Derecho limitadas a la simple repetición de los códigos y reglas instaurados por quienes están gobernando y que forman una estructura de derecho positivo cuyo resultado innegable es el atraso, la alienación, la explotación y la miseria para el pueblo;
  • ·         Con estudios de Filosofía (madre de las ciencias) que den las herramientas conceptuales válidas y suficientes para lograr comprender la realidad e iniciar su transformación; sin limitar el pensamiento a la aceptación de las teorías de los ideólogos de los esquemas imperantes y decadentes;
  • ·         Con estudios de Ciencias Económicas que permitan iniciar una corriente de pensamiento que elabore las teorías y esquemas requeridos para conjurar de una vez por todas nuestras continuas crisis. Sin continuar con esa formación de inescrupulosos al servicio de los monopolios y de los evasores de impuestos.
  • ·         Con estudios de Administración que nos permitan formar las estructuras exigidas para no continuar al servicio de unos pocos privilegiados, importadores de modelos organizacionales que desechan nuestra cultura, idiosincrasia y necesidades.
  • ·         Con estudios de Historia donde se mire en profundidad el pasado para determinar las causas de nuestro atraso y dependencia, de forma que se pueda atinar al decidir respecto de las alternativas para la final liberación;
  • ·         Sin “cátedras” de ningún tipo, con espacios para el aprendizaje orientado a la investigación científica de los problemas que atañen a las organizaciones desde el marco de la idiosincrasia, esquemas organizacionales y nutridas por el pensamiento de nuestros líderes al mando;
  • ·         Sin que se estereotipe la persona en una deformación profesional que le inhabilite para comprender que más allá de nuestra disciplina específica hay una humanidad desenvolviéndose en dramas de continua transformación.

domingo, septiembre 18, 2011

Desde el fuego sin pasión

El alma esta aquí sin poder decir,.

constreñida por las palabras que le son impropias,

nada le importa, excepto lo que está frente a su pasado,

hoy es el ayer que en algún momento proyectó…

 

Nada hace la diferencia, sólo el pasado marca,

el ahora es un eufemismo para lo que jamás será,

el mañana es la puta que jamás abrirá las piernas,

sin embargo, hoy paga por ese orgasmo.

 

Ese ritmo frenético donde la guitarra indica

hasta donde servir, no dice nada diferente,

a esperar hasta hacer todo un agobio el

seguir, el cansancio de simplemente ser…

 

No pides entender, sólo escuchas,  lo que jamás

será una manifestación de voluntad, lo que el

mañana calificará de un presente inocuo,

lo que el futuro entenderá como un pasado perdido.

 

No dejes volar lo que son cadenas perpetuas,

esas notas de alegría no son más que una ilusión

vana, por cierto, no pretendas una voluntad

donde no hay ni alma ni amor…

 

Deja que el volumen siga a la avalancha,

será el talud que sepulte esos cortos sueños,

sin religión ni ensueño, tan sólo con las

vísceras expresando lo que es el devenir….

 

martes, mayo 31, 2011

Pasiones

La miseria y el desgano ahondan la pesadilla de seguir siendo.

Los demonios y fantasmas merodean mis momentos y no me dan sosiego.

Palabras graves con aire de trascendencia hacen eco en el rebujo que mi mente se ha vuelto.

Los embrujos de la mujer amada como niebla cubren mis miradas.

 

Ya sin visión clara pertenezco al ensueño,

mi mundo sólo ideas falsas y engaño representa,

de nada sirven embravecidos y colosales esfuerzos,

azules espejismos adornan el cruento paisaje.

 

Bebedizos de odio, amor y otras fútiles pasiones

inundan mi paladar con sus hieles y mieles,

el apetito de saber, tener y poder estruja  mis vísceras,

el miedo irrefrenable de estar sin ser… me mata.

domingo, mayo 29, 2011

Carencia

Son tus noches cual mis días:

obscuridad inclemente,

frio aciago, olor a muerte.

Despidamos las carencias.

 

Olvidemos recordar momentos bellos.

Sucumbamos ante la tiranía de la verdad.

Persistamos como amantes hasta nuestro fin.

Embriagados de compañía resistamos la soledad.

 

Desistamos de estar juntos,

a cambio, disfrutemos simplemente ser.

Dormidos bajo nuestras sombras,

lancemos al viento perdido nuestro poema.

 

El silencio alegra nuestras tumbas,

celebremos tener nuestros epitafios.

Este amor florece enraizado en el frio

mármol que tapará nuestros despojos.

 

Esas tus noches recibo a cambio

del arcoíris de tu sonrisa fugaz.

El azul intenso de tu fe sustrae

irrefrenable mi aliento… carencia…

viernes, mayo 20, 2011

Dudar

            Vivir

Solamente por el acto involuntario de respirar,

deja que tus pies bailen en giros locos,

malgastar las ansias irrefrenables de existir,

dudar del fin ulterior con afán predicado…

 

            Amar

Solamente por el hábito y la costumbre,

deja la verdad como pretensión infame del hombre,

malgastar los sueños y dejarlos tirados rotos,

dudar del gozo de dar sin recibir nada a cambio…

 

            Odiar

Solamente por entender la naturaleza propia,

deja los actos de heroísmo sentimental a dioses,

malgastar la posibilidad de ser por mera terquedad,

dudar de lo liberador del amar con ahínco…

 

            Morir

Solamente por la convicción de no querer seguir,

deja que la luz se extinga inexorable de a pocos,

malgastar tus pasos caminando al borde del abismo,

dudar de lo imperativo de ocuparse del mañana sin ser hoy…

 

miércoles, mayo 04, 2011

Sin fe

Estamos bien, para cambiar,
que otros hagan el quite.
Cuídate vos, hasta ganar,
vas a ganar si así persistis.


Seguir, esperar, por la lápida;
sin afanarse ni rendirse.
Sin fe, ni voz, ves el mundo acabar,
aunque otros distinto lo prediquen.


Apurarse, no bastará,
igual termina quien persiste.
Igual llegó, el gran final,
rotos los sueños, ya nada existe…


También se fue, verás,
el tiempo de aquel
que te apura
y mucho insiste.


El hoy igual que el ayer se irá,
nada lo evitará, ni la verdad
ni la razón y menos el hombre…
no llores más, ni te pongas triste.


Deja con calma pasar,
cuanto fuera algún día,
¿de que sirve llorar
las horas perdidas?


Cargo sólo con mi suerte,
intentando entender mi destino,
sigo sanando de a pocos la herida,
estoy sangrando la razón que me lastima.


Verdad y razón esquivas son,
la fe y el amor al sueño pertenecen,
¿Qué importante va dejando la vida?:
aguardar tan sólo a que llegue la muerte.


Sin fe, ni voz, ves el mundo acabar,
vas a ganar si así persistis.
Igual llegó, el gran final,
no llores más, ni te pongas triste.

martes, abril 05, 2011

OTRO MÁS (iii)

Y sales en las mañanas desbordante de sueños, tomas el autobús que te arrastrará con tu carga de sueños hasta el lugar en el cual continuas tus tareas. Y llegas a tu lugar de trabajo y les saludas y te saludan, y deseas que estén bien, y ellos desean que estés bien; pero ni a ti te importa su estado realmente, ni a ellos el tuyo. Y trabajas, y eres eficiente, y eres productivo, y les hace ganar dinero, y tú te ganas un miserable salario que apenas si alcanza para que cubras tus mínimas necesidades, y te regañan, y te explotan, y te felicitan, y te sobornan… y durante el trabajo no sueñas. Y termina tu jornada y te despides de ellos con un hasta luego, cuando en realidad no quieres volverlos a ver nunca, ni ellos a ti. Y llegas a casa, y estas a salvo, y te sientes seguro, y sueñas, y fabricas mundos, y todo lo arreglas, y pasa la noche, y tu soñando… y sales en la mañana enchido de sueños…

(Febrero/17/1995)

OTRO MÁS (ii)

Cotidianidad, nada nuevo, todo igual, todo viejo, todo recuerdo, todo nada, todo todo.
Caminar con la sangre desnuda por un mar de indiferencia te pone al descubierto, quizá todos querían hacerte daño, quizás todos te entenderían, pero nadie lo hace; tan solo te observan como fenómeno, te ven como la excepción, eres el espectáculo que esperaban: sangre caliente, humeante, roja, viscosa, sangre para sedientos.  Sangre  que fluye pura y satisface sus mórbidas indiferencias (descompensados que tratan de sentirse bien con tu dolor: lo disfrutan).  Te miras y compruebas cuanto sangras, los miras y aprecias su satisfacción. Cortas el sangrado y te abandonan, ya no te necesitan, ya no les interesas, (buscarán alguien más, otro que sangre, que satisfaga sus sórdidas inclinaciones). Te detienes y te arrastran, ves ese constante fluir de estúpidos sedientos que pasan por tu lado, apurados tratan de llegar a sus guaridas a refugiarse, pero allí solo encuentran un dolor diferente, es un constante sufrir en carne propia y deleitarse con el dolor ajeno (pequeños vampiros de mierda).  Y tu allí, caminas, te detienes, nada cambia, todo pasa, todo queda. Te mueres y ellos disfrutan. Ellos sangran: tú descansas. Existencia de caníbales. Te alimentas de monstruos y eres comida para monstruos. Y sigues soñando, quieres cambiar, crees poder cambiar tú y cambiarlo todo, y vivir mejor, y todo estará bien, y todo todo. No sueñes más, pequeño idiota de sueños rosados.

(Febrero/17/1995)

miércoles, marzo 23, 2011

OTRO MÁS (i)

¡Ansiedad!... ¡Ansiedad!: ¡ANSIEDAD!
Caminar apresuradamente por una vía que le conduce a  ningún sitio, resequedad en los labios. Las manos inquietas, incontrolables: en los bolsillos un instante, cruzadas, sobre la cintura, libres, pasan sobre la cabeza.
Mirada fija en ningún sitio en especial saltona (bulliciosa). Pensamientos: a intervalos. Se pierde entre sus ideas, no sostiene un pensamiento lógicamente, pasa de una idea a otra sin conexión.
Transcurren unos momentos y todo pasa; ahora, solo siente algo: depresión, depresión absoluta. Se sienta cansado, se relaja, se duerme: y comienza su vida.
Ahora se ve sereno, nada hay que pueda interrumpir su tranquilidad. Todo es claro, toda esta definido, nada queda al azar.
Su cuerpo tiene una gracia sin par: esbelto fornido, definido en detalle; su rostro es de trazos recios pero dulces: infunde respeto y admiración. La palabra que le define: seguridad.
Su vida transcurre en medio de triunfos. Ahora mismo, se ve paseando por un inmenso y bello jardín, lleva un interesante libro bajo su brazo izquierdo, camina hasta la sombra que brinda el grande árbol del jardín y se sienta recostándose en el tronco,  dispuesto a emprender la lectura.
Lleva ya unos cuantos capítulos leídos, cuando sintiéndose observado, levanta la mirada y ve como una bella mujer avanza hacia donde él se encuentra, mirándolo a todo momento.
Ella, ahora que puede verla mejor, es bellísima: su pequeño talle tan frágil, contrasta con el brillo de sus ojos inteligentes, juguetones, intrépidos, temibles. No resiste su mirada, la huye. Cierra el libro, se levanta y sale a su encuentro.
Esta ya frente a ella, muy cerca, no puede hablar, sus ojos le dan miedo, ella sonríe enigmáticamente. Se siente cada vez más inseguro, ¿Cómo puede ella dominarse si ni siquiera le ha derrotado en el campo del debate? Es más, nunca han hablado, no conoce el tono, ni el timbre de su voz. Su sonrisa, sus ojos, le hacen sentirse torpe.
Ahora pasean juntos, ya el arrojó el interesante libro a un sitio cualquiera, si lo tenía en las manos no podía concentrarse en ella. Ella en ningún momento dejaba de sonreír y mirarlo.
Él a todo instante, como un completo idiota, le sigue; no sabe a dónde se dirigen, no sabe de dónde salió ella, no sabe por qué la sigue. Pasan horas, días, meses, años, ella caminando, el siguiéndole. Esta desconcertado, ¿A dónde se dirigen?, ¿Por qué ella no le habla?, ¿se burla de él?, ¿le mira con odio?, éstas y más, son las dudas que han entrado a perturbar su espíritu.
Ya no resiste mas, ella le ha colmado la paciencia. La toma por el brazo, haciéndole detener su constante caminar, le habla, le plantea todos sus interrogantes, ella le mira y sonríe como antes, como siempre. Él la sacude fuertemente, repitiéndole las preguntas, ella continua mirándole y sonriendo. Él la suelta y corre, corre con miedo; ella le sigue, y continúa mirándole y sonriendo. Angustiado, cada momento mira hacia atrás, y ve como ella le sigue, mirándole y sonriendo. Parecería que, incluso, ahora, cuando ella le sigue, lo mira más penetrantemente y sonríe más enigmáticamente.
El huye, presa de una ansiedad sin límites, impotente. Transcurre el tiempo, ya no piensa; ella le mira y sonríe. El huye, acobardado, ansioso.
Ante su incapacidad para deshacerse de esa carga, sólo el tiempo, imparable en su transcurrir, actúa. Ya todo ha pasado, solo queda ese sentimiento de su sabor y color indefinido: depresión…
Despierta, y aun con la pesadez del sueño, pasea su mirada alrededor y allí entre la bruma la descubre, es ella, es otra pero la misma, y esta mirándole y sonriendo…

Dentro de tus ojos

Rápido se agotan los instantes cuando estamos juntos.

La ceguera pertinaz avanza sobre el mundo.

En tu ausencia la brevedad se hace eterna,

susurra a voces la inutilidad de la existencia.

 

Son los ojos sin cuencas que los alojen

los que obnubilados te dejan sin entender.

Llegas a mis brazos y me invade el blues,

abandono por momentos este mundo.

 

Nada importa ahora, cuando estamos juntos,

pues, quedarán grabados e indelebles

los recuerdos de esta pasión.

Réquiem por el futuro.

 

Nada es suficiente para saciar las ansias que tengo de vos.

Las sombras todo lo cubren y calla el blues luego de que te vas.

Sigo aquí esperando mirar tus miradas,

tratando de ver dentro de tus ojos si aún estás.

domingo, marzo 13, 2011

Humo y sombras

Exclusivamente por aguardar
sigo respirando, dejando pasar,
continúo en este empeño loco,
hasta que exhale mi último aliento.


Nada valioso que revelar,
esperando se esfumen los sueños rotos,
sombras revolotean en frente… mis
demonios particulares.


Uno a uno los veo pasar del tormento al gozo,
eso poco importa, jamás veré lo que deseo,
son demasiadas las rutas no partidas,
muchos los caminos renunciados,
bastantes las muertes aplazadas…


¿Quién vence los fantasmas?
¿Quién expulsa los demonios?
¿Quién alcanza la verdad?
¿Quién sigue vivo sin querer?


La voluntad del idiota podrá ser férrea,
¿pero es suya? ¿o es un espejismo de
su mente enajenada?.  La pregunta es:
¿continúa vivo? ¿o simplemente respira?


Hoy tiemblan mis manos intentado
agarrar algo firme que comprometa
los deseos de continuar viviendo:
humo y sombras son inasibles…


Desde la plenitud de la soledad, ebrio de sobriedades,
sumido en largas vigilias, tantas noches desgranadas
deseando enceguecer y ensordecer la mente,
ansiando eclipsar la eternidad de la poco sutil y advenediza muerte,
he gritado hasta quedar enronquecido:
¿será mejor morir de golpe antes que verse desaparecer de a pocos?


La muerte vestida de gala toca a mi puerta,
su traje dorado resplandece, es la mayor
luz que he visto en las eternas noches
que se ha convertido la vida.


Orquestas de bandoneones con
guitarras embravecidas llenan el
ambiente, y ella, ¡oh maldita!,
ríe a carcajadas, bailoteando hasta
caer vencida por la fatiga.


Me apresuro a levantarla, no sea que
se esfume y me deje continuar
vivo en medio de esta porquería:
humo y sombras son inasibles…





viernes, marzo 04, 2011

Noches insomnes

Noches insomnes, noches que han perdido

el sueño, quizás por miedo, miedo

a despertar y encontrar que la realidad es

algo bien distinto a lo que pudieron imaginar.

 

Los sueños de libertad ya tienen

viejas lápidas con sus nombres inscriptos;

el éxito es cosa de museos, reserva para otros;

el amor, ah, es sólo eso: una palabra envilecida.

 

En la vigilia noche tras noche, queda la sensación

del tiempo consumido, es un tiempo denso,

pesado, que apuñala el destino a cada segundo,

enfrenta la vida a ideas confusas en deformes

amasijos, destiladas imágenes borrosas.

 

Eternas madrugadas crispan los nervios,

sin sucedáneos ni atenuantes.

Es la muerte a tus espaldas oteando

sobre tus hombros, ansiosa de sentarse en tu regazo,

posa su fría mano sobre tu hombro

en el instante mismo que te alcanza la duermevela.

 

Esas son las noches de quien no tiene día

más que para ocuparse de nada,

siempre en algo distinto a sí mismo.

Las noches develan con sus soledades

la crudeza del tiempo con sus endemoniadas carencias.

 

Noches de blasfemias inenarrables.

Noches vastas y perdidas.

Noches de iluminación fugaz y engañosa.

Noches de burla incontenible.

Noches de escarnio interior. Noches de picota.

 

Noches tan cortas como la eternidad.

Noches carentes: de propósito y de fundamento.

Noches, tanto solo eso: noches.

Noches, esas son mis noches.

domingo, febrero 20, 2011

EL SOL FALLECE

Veo pasar, muy lentamente,
todo ese amor hacia la muerte,
ella se va, deja mi mente,
por causas que hoy, yo no comprendo.

Ella lloró, regó sus lágrimas,
sin comprender su fea suerte,
conmigo a su lado, todo fenece,
no pudo ahí, volver el tiempo.

Se va a prisa, se desvanece,
solo percibo, el aroma de su cuerpo.

Deja aquí, dentro de mi pecho,
un gran vacío, llenó el espacio,
donde su cuerpo llenaba mi vida,
hoy sólo creo, que el sol fallece.

Ya justo aquí, un gran inclemente,
llora y grita, por lo que pierde,
y mis palabras se marcan fuerte,
dejan decir: amor eterno.

Se va a prisa, se desvanece,
solo percibo, el aroma de su cuerpo.

Hay otro día, ya no me importa,
sigo aguardando que ella vuelva
y desde aquí veo venir,
rauda la muerte, a mi…

Tanto dolor, he soportado,
que ya agoté todas mis fuerzas,
viajo solo, en busca de ella,
encuentro sólo su fantasma…

Se va a prisa, se desvanece,
solo percibo, el aroma de su cuerpo.

Todo es inútil, se acabó el tiempo,
ya amaneció, ya hemos muerto.
El mundo nuestro: se consumió;
quedan cenizas, el sol fallece.

miércoles, febrero 16, 2011

OTRO MÁS

Abandonado en un rincón se encuentra él, ya a nadie le preocupa. El qué le pase a nadie le importa, el mensaje ya no fluye. Con la cabeza clavada sobre su pecho se muere poco a poco, muere de abandono, muere de desprecio, muere de silencio; vive de soledad. La soledad le roza a cada instante, le transforma hasta aislarlo, le muta constantemente: ya es hombre, ya objeto, ya cosa, ya nada…

El silencio, por callar, le ha cortado la facultad de habla, ya no sabe pronunciar palabras, no las necesita; pero ha aprendido a escuchar el silencio con sus constantes decires, con sus mensajillos camuflados que sólo capta y comprende quien ha vivido en silencio absoluto (quien ha callado sus pensamientos, sus sentimientos, su corazón, sus ojos, su boca, su respiración: quien ha mutado por hombre-objeto-cosa, quien ha muerto para renacer supra consciente, quien vive totalmente muerto).

Cosas se viven, cosas se sienten; pocas entendemos, de pocas aprendemos. Hombre-objeto-cosa son uno, indivisible, incomprensible, inmaterial. La mirada perdida a algún sitio se dirige. La palabra mal dicha también se escucha. Al andar en círculos también se desplaza. Al pensar acertadamente también se yerra. Al pensar equívocamente también se razona. Al vivir plenamente también se muere…

La historia es una, solo cambia el narrador. Raudo el tiempo transcurre y, desde el rincón de su vida parcelaria, él observa los agravios, su pensamiento volátil a nada le conduce, y el tiempo transcurre al parecer cada instante más rápido, y él suspenso en el rincón, ya de pie, ya de rodillas, ya sentado, ya tendido, ya soñando, ya inerte, ya niño, ya joven, ya adulto, ya… ya; y todo eso es a la vez, no hay sucesión ni orden, es como la cachetada: al momento.

Y el ojo ve la rosa que crece, esplendorosa, fértil, vigorosa, sobre el abdomen putrefacto de aquel hombre-objeto-cosa, todos le rodean y le contemplan con ansias: ¡Que hermoso espectáculo! ¡Es tan bella la rosa!; otros no saben de bellezas, pero igual se sienten aliviados, encuentran allí, en el apestoso cadáver, en la carroña, el alimento, la opción de vida, la satisfacción de la necesidad latente; otros ni lo uno ni lo otro, solo disfrutan con mórbido deleite el dolor, la angustia y la muerte ajena, como compensación a sus frustraciones o como medio para sentirse superiores. Y he allí, en aquel puto rincón, otro más.

 

(Septiembre/11/1995)

 

VOS

(A:M)

Verdad incontenible,

vivacidad primaria

naturaleza impredecible,

belleza legendaria.

 

Pupila descarnada,

palabras laboriosas,

escucha alentada,

¡cambias tantas cosas!

 

Me niego a continuar,

se menguan mis palabras,

no puedo ya expresar,

¡que cosas tan extrañas!

 

(Septiembre/06/1995)

 

CÓMO NACIÓ EL SOL

Su figura para formarse deformó

la articulada y estética figura de

quien la pariría.

 

A medida que se desarrollaba

hinchaba como globo el vientre que la albergaba

su sonrisa crecía, al ritmo de las lágrimas.

A ratos parecía querer salir a ver

quién y por qué lloraba, lloraba su nacer.

 

Recorrió en ese vientre los estados del amor,

sintió el calor del abrazo,

la calma del susurro,

la tranquilidad del cariño,

lo abrasador de la pasión,

la acidez del dolor,

lo mortal de la incomprensión;

pero principalmente, descubrió,

descubrió su misión:

ser referencia y orientación de actos y sentimientos,

de instintos y ensoñaciones,

de pragmatismos y utopías,

de realizaciones y frustraciones,

de angustias y sosiegos,

es decir, de vida y muerte

de quienes le engendraron.

 

Y llegó el día en que su mundo se abrió

más allá de la calidez en que empezó su existir,

hubo de sentir el vacío de alguien a su lado,

hubo de tiritar a pesar del fuego

hubo de llorar para otros poder reír

hubo de pensar cuando ya existía

hubo de mirar para poder ver

hubo de oír para poder escuchar

hubo de palpar para poder tocar

hubo de lamer para poder gustar

hubo de respirar para poder oler

hubo de… también para poder… además.

 

Ahora es aquello para lo que fue destinada:

pensamiento vivo aspiración mutada,

cambio repentino sueño derrotado,

punto en el espacio referencia universal,

espíritu vagabundo cuerpo material,

verdad insondable experiencia muerta,

simplemente vida excepcional estrella.

 

Todo se sabe, nada ha dicho,

ignorancia docta, sapiencia malograda,

sólo llora y le entienden.

¿Acaso será el llanto el lenguaje universal?:

Todas las madres lo entienden,

a todos los padres les espanta,

todo conquistador le ignora,

todo decadente le ensalza,

todos le viven,

todos le sienten,

todos le corrompen…

 

Su gracia es corta,

desarmónica y arrítmica.

Por sol se le conoce,

Estrella o Astro le llaman,

pero ellos, los sacrílegos,

decidieron renombrarle

y GHEIRA le han llamado.

 

(Junio/16/1995)

 

martes, febrero 01, 2011

ANTOJOS

(A: M.)
     Habla, piensa y se desenvuelve como hombre,
                                     pero,
                            desde el fondo,
                        desde lo más profundo de su ser,
                                   es mujer.
                             Mujer como pocas.

     Ella es grande, que digo grande: enorme.
Su pequeña figura alberga una fantástica inmensidad.
  Su sonrisa es elástica: se extiende a los demás.
             Su pensamiento: viene de si, sin excluir.
    Su aspecto negativo: es mujer. Sin embargo,
        se comporta, sabe serlo sin fastidiar.
Corrobora el que existen excepciones a la regla:
                  Las mujeres son estúpidas.
         Falla la regla, cae el principio.
               (Para mi ventura y alegría).
Ahora no hay impedimentos, no hay prevenciones.
                       Ya no es mujer,
                          al menos
                    no mujer estúpida.


(Junio/16/1995)

martes, enero 25, 2011

Pequeño dios amante

Se oye aún la voz de un muerto,
que ha perdido el último aliento,
¡entiendan! por ausencia hay silencio.
Sin nadie que sepa lo que yo siento.


Todo di sin reservar.
No guarde ni mi pensar.


Pequeño dios amante
sin camino que lleve a la verdad,
somos dos en las sombras
por la eternidad… cree


Pequeño dios amante
sin camino que lleve a la verdad,
somos dos fantasmas
ya sin sombra… ni eternidad


Todo di sin reservar.
No guarde ni mi pensar.


Poca vida para tantas palabras,
un cuerpo seco, como tierra ya sin huerto.
Sólo lágrimas quedan regando arenas…
mares de dolor por la eternidad…


Todo di sin reservar.
No guarde ni mi pensar.


Pequeño dios amante
sin camino que lleve a la verdad,
hoy no somos nada
no hay sombra… ni eternidad
¡Nada¡

Sabor a vida

Justo en el momento en que
los efectos duraderos de un
sinsabor inundan las papilas gustativas,
reaparecen grabados en finas gotas
los sabores emanados de tu cuerpo.

La sal de tu espalda esculpe memorables
jornadas sobre los azahares de la vida;
Las dulzonas e incandescentes pizcas de sudor que
resbalan por tu cuello se hacen innegables
confidentes de tu esmero;
Las mieles de tus labios se esparcen diáfanas
e invitadoras por tu faz a la espera
de quien las valore en mucho;
Las magras, sensuales, castañas y salubres
carnes de tus senos apremian al deleitante
a entender la vida como un don;
Las azucaradas esencias de tus piernas
inundan con sus sagacidades el recorrido por
el serpenteante sendero ascendente;
¡Ah¡, empero, el supremo deleite
se halla arrebujado en la cajita de sorpresas
que es tu seductor reino sexual…
tan pronto salado como dulcísimo,
ya agrio, otrora ácido, pero siempre
un enigma que sólo se resuelve libándolo…

No puedo olvidar cada pizca paladeada
al correr y recorrer tu cuerpo.
Se han grabado en mi memoria eterna
las suaves texturas propuestas por tus carnes.
Cada espasmo de tus músculos al contacto
de mis noches ávidas, marca surcos
imborrables sobre las arenas de mis recuerdos.

miércoles, enero 12, 2011

Los ojos de mi mundo

Cuatro ojos ven mi mundo,

son ojos de mujer,

                   (por eso no logro comprender

                     las delicadas formas que perciben)

son ojos que penetran y dejan desnuda el alma,

que desgarran toda la piel y exponen las entrañas,

son ojos irresistibles

…son ojos de mujer amada…

ojos en los que creo sin descifrar su magia,

ojos como esos, los cuatro ojos,

imposibles de ignorarse.

 

Ojos tristes cuando lloran,

ojos felices cuando brillan,

ojos extraños cuando se cierran,

ojos grandes cuando consuelan,

ojos temerarios cuando increpan,

ojos tiernos cuando enseñan,

ojos feroces cuando defienden,

ojos absurdos cuando niegan,

ojos fieles cuando miran,

ojos que aletean cuando parpadean,

ojos que proponen, ojos que disponen,

ojos que saltan, ojos que duermen,

ojos que expresan, ojos que denuncian,

ojos que señalan, ojos que avalan,

ojos que exigen, ojos que entregan,

ojos que levantan, ojos que anuncian,

son ojos irresistibles

…son ojos de mujer amada…

ojos, simples ojos, sin cuales queda

ciega mi alma… si aún conservo una…

 

Cuatro ojos que revelan el mundo y sus gracias,

dos ojos candorosos y febriles en lontananza,

dos ojos ciegos que por la fe todo ven y cambian,

son cuatro ojos tan distintos a los dos míos,

a quienes el miedo calza y pese a la

fuerza de los pasos no

saben a dónde dirigirse.

Esos cuatro los quiero míos,

hoy y para siempre, los

cambio por estos dos y

con ello gano suficiente:

veo el mundo en su forma,

veo gente…

son ojos irresistibles

…son ojos de mujer amada…