martes, agosto 28, 2012

Ausencia inútil

Y afuera hace frente al viento que ulula,

permanece solitario, haciéndose viejo,

aguardando por sueños que se olvidan,

¿será que aún siente?

 

Hey vos, empedernido sepulturero de la luz,

veterano de mil batallas interiores,

¿conseguís desbordar miedos y lujuria,

o sólo derramás zumos putrefactos al frotarte?.

 

Hey vos, ya que pronto estaré partiendo

y dejando ésta mi mal  llamada casa...

¿por cuánto tallás orlas

y letras vanas en mi lápida?

 

Hey vos, conseguí un par de lágrimas hipócritas

entre quienes indiferentes al sepelio asistan...

¿te encargo un par de frases tristes

y fingidas en el funeral desaliñado?

 

Hey vos,  acaso y mejor, simplemente muero

haciéndome invisible frente a todos...

¿reconocerán mi ausencia inútil

cuándo al fin me haya desvanecido?

 

domingo, agosto 26, 2012

Sabor de hiel

Bocas llenas de mentiras,

inundan de palabras vanas

todo cuanto escuchas...

y vas en pos de un sol que nunca saldrá...

 

Escóndete en tu interior putrefacto,

enciérrate, no te atrevas a cruzar,

al menos no esa línea, duérmete...

camina a tientas en tu oscuridad...

 

Algún día verás salpicado de color

todo ese abrojo a tu alrededor,

quizá, sólo quizá, sea el dolor

la pincelada final para el paisaje.

 

Las palabras vestidas de color en tu oración,

las pupilas agitadas en la fatal oscuridad,

los ojos inanes, secos de lágrimas,

los estertores febriles sacuden tu piel.

 

Y sigues ahí, de pies, vencido y sin fe,

oculta tu rostro de piedra agria,

deja tus pies de barro pantano ser,

abandónate al sabor de la hiel...

sábado, agosto 25, 2012

A paso de blues

Supe soñar hasta la fatiga,

yo me engañe, me hice creer,

que estábamos unidos

para siempre en la vida...

 

Hoy aquí estoy,

cansado de la vida,

lamiendo mi herida,

aguardando el amor...

 

Se hace eterno e insoportable

este adiós inacabado,

desde el infierno terminaré

de pronunciarle...

 

Suena el compas de eterno blues,

agitado y bailando a su paso

se va el maldito tiempo...

y yo voy a por él...

sábado, agosto 11, 2012

Fuego en tu ser

Imagen sin recuerdos,

eso he visto en el reflejo de tus ojos,

ese embrujo de tus labios invita,

cada palmo de tu amor he recorrido.

 

Nada me aleja de tu visión,

imagen que no quiero olvidar,

nada que pueda yo olvidar,

tan solo el fuego te puede perder...

 

De los dos

Se escapa mi aliento,

suspiro a suspiro,

lento y muy despacio,

se aleja mi alma.

 

Ella se aleja poco a poco,

me dio todo lo suyo,

espasmo a gotera,

de uno en uno....

 

Me deja un estertor,

no quedan secretos,

tan solo lagrimas secas,

el sol no alumbra, tan solo releja,

la luz desvanece....

 

Puedo sentir en el silencio,

todo me abandona para siempre,

ya sin amor, ya hoy sin cuerpo,

incluso ya sin secretos,

todo sin prisa, tan solo llanto.

 

En un instante se alejó, no logro comprender como

en este cuarto intenso todo obscurece,

todo un adiós golpea mi pecho al jurar lo eterno,

sin pausa, sin brisa....

 

Sin ella no hay una razón,

muere sin prisa, este mundo abandonado,

frio para siempre...

 

Sigo yo aquí, pretendo explicar

como se muere todo un mundo

que nace de la ilusión, aunque

ya hoy no hay regreso para el infierno,

donde lentamente fundimos nuestros cuerpos,

 

Inútil es, no hay ya razón

para este sol que sigue dando amor,

aunque no queda ya un de los dos....

 

 

jueves, agosto 02, 2012

Esta noche larga

Cuando termine esta noche larga,
espero escuchar una nueva canción.
Si te viera desde mi ventana,
sería ver salir el sol.

Inútilmente he dedicado tiempo a
pensar en el mañana que no vendrá,
debería simplemente vivir en el ahora
sin temer por el futuro que no llegará.

Con un delicado parpadeo desaparecerían
las fatídicas nubes que cubren la visión,
un par de sueños y aquí ya estás:
en la duermevela de esta ilusión.

Inmerso en las lides de informaciones divulgar
puedes darte cuenta de cuán inútil es todo
el trabajo contable, meras fruslerías y desconfianzas:
buscas cómo saber cuánto te engañan...

De lo que hubo ayer, ya nada queda hoy,
mañana nada habrá de lo que aún resta.
Una vez y otra vez, te dejas enceguecer
por el miedo de vivir lo que imaginas en la ilusión.

Mejor morir que permanecer temblando hoy
por vivir en el mañana que incierto es.
Preferible ver llegar la noche de un día vivido
a morir temprano por miedo a las sombras.

Y así vas en la vida,  si miras tus amores,
te esfuerzas por entender la razón de tantas
desilusiones, pero sigues ahí: terrible, vano y acabado;
dueño de algo más grande que la realidad: el autoengaño.